Hace apenas un mes,
un buen amigo me mandaba por una red social una foto cuya leyenda decía:
"FELIZ AÑO, UNO MÁS SIN GOBIERNO DEL PP".
No tardé en contestarle: "¿Y crees que
el gobierno actual, con los exiguos apoyos que tiene, podrá agotar la
legislatura? Yo todavía abogo por que se deje tres cuartos de los escaños del
congreso vacíos en representación de un 75% de votos emitidos en blanco. Por
supuesto con el Senado también vacío, dedicado a menesteres culturales y de
participación ciudadana, en pro de una democracia real, no como la que tenemos,
que parece de pacotilla, república bananera o monarquía comandada por el
príncipe de Zamunda, ¿Te acuerdas de la película?"
Hace
algo más de 4 años yo me preguntaba: ¿Dónde están los ecos del Movimiento 15 M?
Esa fantástica iniciativa se diluyó o
fue engullida por Podemos, el partido de izquierdas que, parido por Pablito Iglesias y
su camarilla, representó un soplo de aire fresco y esperanzador, hasta que poco
después se quitaron la careta y aparecieron los fascistas “progres” que son
ahora, populistas donde los haya, con honrosas excepciones como I.Errejón entre
otros, recientemente defenestrados por la cúpula, ni se había convertido el
“coletas” en lo peor de la casta a la que tanto había criticado.
Actualmente, sé de la existencia de varias
plataformas ciudadanas que pretenden un cambio de paradigma en el panorama
político de nuestro país, que a un servidor le parece tan apasionante como
peligroso, esto último dada la polarización creciente provocada por la eclosión de VOX, que aglutina
a fascistas de ultraderecha y desencantados del sistema muy respetables frente
a Podemos, que integra a votantes de izquierdas también muy respetables y
fascistas y populistas de ultraizquierda que no lo son tanto.
El otrora nefasto bipartidismo dio paso a
varios partidos que no sólo no han resuelto nada sino que parecen complicar la
situación. Los partidos o coaliciones aparecidos en los últimos años son cómplices
o no han robado todavía porque no han tenido cuotas de poder, los sindicatos
mayoritarios han demostrado altas cotas de corrupción en su seno y su lenguaje
está claramente obsoleto. La reciente aparición de VOX en las elecciones
Andaluzas ha sido “exitosa” y ha provocado un cisma en el PP, mal que quieran
los peperos minimizar los efectos de la escisión cerrando filas en torno al
joven P. Casado, líder del ahora partido de la oposición, que todos
sabemos está patrocinado por el Vaquero de las Azores.
Cómo me gustaría que
surgiera una nueva fuerza política (no confundir con Fuerza Nueva, el partido que, comandado por
Blas Piñar, apareció en España tras la desaparición del “Generalísimo”, y que se oponía a la
promulgación de la Ley de Refoma Política, antecedente inmediato al surgimiento
de la Constitución Española en Diciembre
de 1978. Los nostálgicos del régimen franquista, herederos de la idea de
recuperar la España de “Don Francisco” “Una, Grande y Libre”, son representados
ahora por el VOX del ínclito Santiago Abascal). Cómo me gustaría, decía, que
surgiera una fuerza política, liderada por gente formada, sin intereses
personalistas ni sectarios, sino dispuesta a hacer cosas por la ciudadanía, que
aplicara el sentido común, sin pretensiones de enriquecerse, sin color
político, que buscara soluciones reales a los problemas planteados. Basta ya de
quejarnos de lo mal que está todo. A diario me encuentro con personas que
critican a todas las fuerzas políticas, sindicatos, instituciones, etc.
"Estoy harto de la crisis, de la corrupción, de los mamoneos, de los
sobres, de los anteproyectos de ley, de las leyes ya aprobadas, de los brotes
verdes, de la prima de riesgo, del déficit tarifario de las eléctricas, de los impuestos
crecientes, de las cifras del paro, de que me culpen de vivir por encima de mis
posibilidades cuando apenas puedo llegar a fin de mes, de los
desahucios...".
Todo eso está muy bien y comparto todas y
cada una de esas quejas pero, ¿vamos a esperar a que llegue una nueva
convocatoria electoral y vamos a ir de nuevo a depositar nuestro voto como
hemos hecho hasta ahora, tapándonos la nariz y apoyando a la opción menos mala?
No señores, yo hace tiempo que no estoy dispuesto a apuntarme a ese
carro, a mis años, yo también me considero un poco perro-flauta, insumiso
político, y defiendo el voto en blanco. ¿Quién se une?
Cambiando radicalmente de tema quiero ahora
hacerme eco de un escrito de Adriá Homs, que recibí hace un par de días
por Whatsapp y que describe un nuevo espécimen muy interesante,
difícil de calificar pero que se nutre de jóvenes idealistas y muy preparados que,
motivados por la aventura y el conocimiento (y ayudados por las nuevas
tecnologías), han levantado las anclas de sus tierras y se han lanzado a
recorrer el mundo. Generalmente,
son personas educadas, críticas, que han pasado por el muelle del sistema y no
han quedado satisfechos de los principales pilares que lo sustentan. Son
inteligentes, respetuosos, han perdido el miedo a los cambios y han
desvalorizado las posesiones materiales. Se trata de gente libre,
independiente, que aprecia la compañía y también la soledad. Jóvenes que
priorizan el tiempo frente al dinero, y que invierten todos sus recursos en
busca de nuevas experiencias. Son amables, predispuestos a compartir momentos
con desconocidos y aprender cualquier actividad, sin restricciones de género ni
prejuicios de clases.
Estos revolucionarios, porque lo son, admiran la naturaleza y saben que el bienestar siempre se halla cercano a ella. Flexibles con los horarios y con los demás, defienden que nada ni nadie debe alterar su equilibrio emocional. Personajes estables, que no necesitan constantes halagos para motivarse, e inventan su propio destino en base a sus gustos y aspiraciones. Sin apegos, acostumbrados a las despedidas, y saben que los héroes fenomenalmente trascendentes existen sólo en las películas. No idolatran, pero sí admiran. Conciben la temporalidad como un hilo que enlaza esfuerzos, descansos y pequeñas recompensas. No compiten con nadie, se alegran de los méritos ajenos, y tratan de mejorar sus aptitudes. Aprecian la pureza de los espacios naturales y se sienten atormentados cuando alguien quiere pasarles por encima sin que medie el respeto. Aman la justicia y la autonomía, y aborrecen la arbitrariedad. Son guerreros que luchan contra la desigualdad y, aunque no presumen de sus cualidades, el carisma que les regala la experiencia, hace resonar sus contundentes mensajes.
Esta generación nómada es
una pequeña porción humana que rompe los esquemas. Constituyen una masa en
auge, que no está dispuesta a vivir las vidas que otros escogieron para ellos.
La revolución está proclamada, y ellos son parte de los luchadores que
cambiaran el rumbo de las futuras generaciones. Son el preludio, el prólogo del
libro que aún está por escribirse. Un aplauso señor Homs por su brillante
relato.
Harto ya de estar harto, ya me cansé
de preguntar al mundo porqué y porqué,
la rosa de los vientos me ha de ayudar
y desde ahora vais a verme vagabundear,
entre el cielo y el mar
vagabundear.
de preguntar al mundo porqué y porqué,
la rosa de los vientos me ha de ayudar
y desde ahora vais a verme vagabundear,
entre el cielo y el mar
vagabundear.
Como un cometa de caña y de papel
me iré tras una nube para serle fiel,
a los montes, los ríos el sol y el mar
a ellos que me enseñaron el verbo amar,
soy palomo torcaz,
dejádme en paz.
me iré tras una nube para serle fiel,
a los montes, los ríos el sol y el mar
a ellos que me enseñaron el verbo amar,
soy palomo torcaz,
dejádme en paz.
No me siento extranjero en ningún lugar
donde haya lumbre y vino tengo mi hogar,
y para no olvidarme de lo que fuí
mi patria y mi guitarra la llevo en mí,
donde haya lumbre y vino tengo mi hogar,
y para no olvidarme de lo que fuí
mi patria y mi guitarra la llevo en mí,
una es fuerte y es fiel,
la otra un papel.
la otra un papel.
No llores porque no me voy a quedar
me diste todo lo que tú sabes dar,
la sombra que en la tarde da una pared
y el vino que me ayuda a olvidar mi sed,
que más puede ofrecer
una mujer.
me diste todo lo que tú sabes dar,
la sombra que en la tarde da una pared
y el vino que me ayuda a olvidar mi sed,
que más puede ofrecer
una mujer.
2 comentarios:
Estimado Petrus:
Celebro esta nueva etapa de actividad en el blog. Espero que todo te vaya bien, saludos muy cordiales desde Alemania.
Muchas gracias, Carlos. Sé de buena tinta que a ti te va muy bien. Cuánto me gustaría volver pronto a Alemania. El blog va muy bien desde que lo retomé a finales de Septiembre. En España se te echa de menos, especialmente quien tú sabes.
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